El primer pete de mi vida, fue a mi primo
A la mañana siguiente me desperté sin saber dónde estaba y por un momento me asusté. Hasta que sentí el calor de su cuerpo pegado a mi espalda y su verga nuevamente dura apoyada en mi cola y sonreí de felicidad.
Primera experiencia con el sexo opuesto (segunda parte)
A la mañana siguiente me desperté sin saber dónde estaba y por un momento me asusté. Hasta que sentí el calor de su cuerpo pegado a mi espalda y su verga nuevamente dura apoyada en mi cola y sonreí de felicidad.
Me levanté tratando de no despertarlo para ir al baño. Sentía mi concha dolorida por el trato recibido la noche anterior, pero nada hubiera podido opacar la felicidad que sentía en ese momento. Me dí una ducha rápida para recuper...