Castigando a mi jefe sin follar - CAPITULO 5 (Fin)

Tenía que acertar ese vino y ganarle la partida a Irina, para conseguir... ¿realmente que quería conseguir yo?

Castigando a mi jefe sin follar

(Alf & Sylke )

CAPITULO 5

Irina y yo estamos expectantes y totalmente entregadas a ese juego de Raúl, al que yo no soy capaz de poner ninguna objeción, tan solo dejarme llevar por ese cuerpo, ese arte para atraparnos y soñar con acertar ese maldito vino y poderme comer esa preciosa polla.

Raúl nos ofrece las dos copas, volviéndose sonriente y exhibiendo orgulloso ese tronco que desafía todas las leyes de la física, en tamaño, en forma y en su e...

Hermanos

Ese fue el regalo más placentero que ella logró hacerle a su hermano en toda la vida.

Las cosas habían sucedido de manera tan vertiginosa, que por momentos la asaltaba la sensación de estar viviendo un sueño del que se despertaría en cualquier instante.

Primero  ocurrió la separación entre su hermano Diego y su esposa, y muy poco tiempo después, el fin de su propio matrimonio.

La endeble situación financiera  por la que estaba pasando, la llevó a pedir a su hermano que le permitiera compartir con él su departamento de dos ambientes donde vivía, al menos hasta que ella pudiera res...

La mama de Alexis, forzada en la cocina

Los lamentos de la señora Rocío solo me excitaron mas y teniendo el completo consentimiento de mi amigo lleve mi verga hasta su orificio anal y comencé a presionarlo

ese día Alexis y yo terminamos de entrenar y como era costumbre nos encaminamos hacia su casa, en el camino comenzamos a charlar de la universidad y de las chicas que nos gustaban, pero Alexis también me contaba de su madre, así es, Alexis sostenía una relación bastante cercana con su madre, claro que para dos chicos de 21 años ansiosos de conocer los placeres del sexo aquella relación nos parecía mas morbosa que prohibida, y es que además la señora roció era una mujer que a sus cuarenta y tantos años lucia...

La Madrastra

Pillados "in franganti"...

Pillados “in frangati”…

Todo empezó aquel día en que iba a jugar al fútbol y finalmente el partido se suspendió por lo que regresé a casa antes de lo previsto. Entonces fue cuando los pillé... No podía creerlo a pesar de que los tenía allí mismo, delante mío, ¡follando!

Ante todo he de decir que mi madre no es mi madre es mi madrastra. Mi verdadera madre murió en un accidente de tráfico, según me enteré más tarde iba bebida al volante y se estrelló contra un árbol, por lo que mi padre, tras...

Taller mecánico de coches familiar 2

Las relación entre mama y mi hermana embarazada conmigo se normalizan ,vivo en un sueño hecho realidad

Como os conté soy david ,en la actualidad a mis 28 años tengo todo lo que deseo.

Un trabajo que me encanta,y un sexo que me llena totalmente.

En casa me esperan siempre con ganas mama y su novia,y venía cada día más a menudo mi hermana embarazada a visitarme al taller para comer juntos.

Tenía morbo por partida doble,muchas veces sexo al mediodía y en la noche.

Llego el gran día,fue por mi 29 cumpleaños,mama me preparo una sorpresa invitando por fin a cenar a Ramón y silvia ,m...

Mi prima Gemma XI

Continúa la noche...

Ver como por las escaleras subía mi prima Raquel delante de mi con mi polla gemela colgando entre sus piernas la verdad es que me lleno de morbo y deseo de follármela y de igual manera de ver algo más. Una idea pervertida y depravada empezó a surgir en mi cabeza y decidí que nada mas llegar a mi habitación tendría que hacerla realidad.

Al entrar en la habitación como siempre todo fluyo. Nada mas entrar en la misma mi prima Raquel se quedo parada mirando la cama y supongo que por un instante pensando e...

Chantaje a mi madrastra promiscua

Un joven descubre el terrible secreto de su madrastra

El descubrimiento de la traición

Hasta el momento sólo eran rumores: susurros a mis espaldas, gestos ambiguos cuando la nombraban, sonrisas irónicas cuando se hablaba de ella… Al principio no lo creí en absoluto. Después de todo, años atrás, Florencia Orgambide fue una vedette de cierto renombre. Ahora, a sus treinta y tres años, ya habían pasado siete años desde que se retirara de su meteórica carrera, pero todavía, al googlear su nombre, se encuentran un montón de imágenes suyas (La mayoría en...

Incesto en el monte de los cuervos

... No tanto, al correrme se la llené de leche y echaba por fuera. Si vieras cómo le caía...

Carmela, después de haber estado diez años en Suiza, había hecho una casa de ladrillos en una apartada aldea gallega donde las otras casas estaban hechas de piedras y barro y donde solo había un puñado de vecinos y todos viejos, menos su hermana, su cuñado y su sobrino.

Era sábado, Sandro, el sobrino de Carmela, un joven muy fuerte, de estatura mediana, moreno, de ojos negros y delgado, iba con su burra por el monte de los cuervos. En los serones la burra llevaba seis sacos que pensaba llenar de piñas...

Sara da su primer oral a su primo

Vamos a narrar la historia de Sara y como comenzó en este mundo del sexo hasta ser una muy buena perra y sumisa.

Mi nombre es Sara, soy una chica un poco introvertida, mis padres me sobre protegen demasiado, así que casi no salía de mi casa si no era para ir a estudiar o algún lugar con ellos, en la escuela siempre estaba muy sola con excepción de algún par de amigas, pero no era muy comunicativa o cosas así, por eso mismo nunca tuve novio en ese tiempo, casi ni podía hablar con los chicos.

Les voy a describir un poco de como soy, mi color de piel es un tono canela suave, mi cabello es negro lacio y me cubre tod...

Mi tío me manoseaba y me hizo despertar al sexo

Mi despertar sexual fue con mi tío, he tenido tanto placer en esa verga, que ni queriendo puedo dejar de complacerlo, no he sentido tanto placer como con él, es tan morboso hacerlo a escondidas, que me le abro todita para que se desahogue dentro de mi y haga lo que quiera sin decirle que no a nada.

Mi tío me lleva 10 años, es un hombre muy guapo, alto, grandote, las mujeres se le regalan, resulta que a él, le gustaba sentarme en sus piernas, me abrazaba y sentía su verga.

Las cosas fueron evolucionando, a veces me sentaba frente a él, con mis piernas rodeando su cintura, me subía el vestido y sentía como le crecía el paquete, se ponía rojo y con la mirada vidriosa.

A veces jugaba conmigo, me hacía cosquillas y quedaba encima de mí, me abría las piernas y se movía muy despacio. Yo me movía...