Vestida para ser cogida...
Tarde comprendí que yo había perdido el control sobre mi esposa. ahora era su amante quien decidía que ropa usar, y también... ¡con quien debía coger!
Vestida para ser cogida…
Las semanas pasaron rápidamente, hacía poco más de 3 meses que Andrés no había vuelto a llamar a Silvia, sin embargo ella estaba tranquila; no parecía extrañarle su ausencia. Incluso… había tomado por costumbre ponerse las ropas que yo mismo le había comprado para cada uno de sus encuentros con él.
Se comportaba accesible, amorosa, yo no podía quejarme, solo que confieso que yo mismo extrañaba verla volver a casa después de haber cogido con su amante, cuando Andrés d...