Ernestina, mi nueva sirvienta negra
Por fin llego mi nueva asistenta, era negra como la anterior, que follaba muy bien, pero esta era monja...
Cuando se marcho mi anterior asistenta, con la cual había llegado a tener una relación muy especial, esta me dijo que la agencia me enviaría a Ernestina, la cual era peculiar.
El día que llegó, cuando abrí la puerta, me quede espantado. Allí había una negrita de unos veinte años, con el pelo corto, vestida con una falda por debajo de la rodilla, camisa abotonada hasta el cuello y chaqueta azul de punto, parecía una monja de paisano. Ernestina, que hablaba bastante bien el castellano me lo confir...